¿Socialismos?

En torno a un comentario por una nota en que implico un orden social que me parece más posible. El Capitalismo colapsa, colapsamos como sociedad, el chorreo que prometía el Capitalismo .... lo que chorrea es la precariedad y la miseria material y existencial en los márgenes ocultos, y no tanto, de las islas privilegiadas de nuestras sociedades. Unos pocos viven en opulencia delirante a cambio de la explotación de unos muchos que con suerte acceden al mínimo mínimo. Y no hablo de lo material solamente, hay ropa barata, shows embotantes, teléfonos anestésicos y comida chatarra abundante. Lo que no hay es educación ni orientación que señale un norte de crecimiento y desarrollo espiritual humano y profundo a los adormecidos con materialidades espurias que corren tras los espejos de colores del mercado liberal. El Capitalismo no tiene medida, porque la consciencia humana aún no es consciente. No hay autoregulación en la medida en que no conectamos lo que extraemos de la tierra, del otro, y el costo que eso tiene, en ecosistemas, en el vínculo con el otro que se va envenenando lentamente. Opresor y oprimido son una dialéctica que se perpetúa en forma fractal en cada espacio de lo humano. El desarrollo de comunidades humanas que puedan poner en juego el interés común por sobre lo demás suena interesante. Alguien me dijo, “pero eso es el Socialismo”... pues no. Pienso que no como lo hemos conocido hasta ahora. Con la salvedad de cierto funcionamiento autónomo de inspiración anarquista que los medios ocultan desde siempre , y que si no son los ejércitos, el gran Estado o la Banca se han ocupado de aniquilar y eliminar todo registro histórico, en algunos núcleos obreros norteamericanos, en Bilbao y otros rincones de España, en algunas comunidades primitivas en rincones escondidos del planeta.... salvo eso, socialismo no ha habido. Los sistemas totalitarios que se han instalado en nombre del socialismo vuelven a ser el Imperio de las ideas de unos pocos sobre el resto, a la fuerza descarada y sin miramientos. Los chinos, los soviéticos, Cuba misma. Una clase vergonzante en sus privilegios, un pueblo apechugando. Si algún amigo de Fidel se irrita, déle una mirada al libro de su leal y antiguo guardaespaldas Juan Reinaldo Sánchez... el poder y los líderes, una misma historia sin color político. Para consuelo queda pensar como un querido amigo mendocino, que ante la crisis que vive Argentina me dijo, “Todos roban Mati, todos. Sólo que algunos roban y además reparten un poco a la gente, es lo mejor a lo que podemos aspirar”. ¿Es esto lo mejor que podemos aspirar? Socialismo no hemos conocido aún.

Greta Warming

Me ha estado rondando explicitar mi posición ante la niña símbolo de la emergencia climática, Greta. En primer lugar diría que le creo totalmente, ella es una niña convencida en una causa que la convoca y desde el plano personal creo alucinante que alguien pueda seguir su pasión con coraje y decisión. Tengo la impresión sin embargo que hay otros intereses que la vieron (ella es lo que cualquier especialista en Marketing y lavado de imagen habría recetado) y han ido aprovechando la oportunidad para producir una serie de campañas y movilizaciones, que nos entretienen separando plásticos en la basura o mirando como Greta se atreve por el mundo, en la comodidad de nuestras pantallas hundidos en nuestra cama dominical. En el tema hay varios puntos que separar. El primero, ¿es el Global Warming un efecto de la actividad humana en el planeta? Hay discusiones eternas. El planeta es infinitamente mas antiguo que nuestra idea de especie habitándolo. Tiene una evolución con ciclos y características absolutamente desconocidos para nosotros. Es un sistema caótico y catastrófico. Nuestra ciencia es en muchos grados especulativa, en cualquier desarrollo analítico deductivo que se base en datos duros, recientes para la historia del planeta, lleva a progresiones desviadas a nivel delirante en la escala de años que implica entender. Nos gusta creer que nuestra ciencia sabe. Nos gusta la ilusión de control. Nos calma. No estaría mal recordar que muchos de los desastres ecológicos que hoy se lamentan vienen de acciones basadas en conceptos científicamente desarrollados. La ciencia no es la verdad, es un conjunto de reglas ordenadas para la producción de conocimiento dentro de sus estrechos márgenes. Hay mucho de incertidumbre, aunque duela. Pues entonces, tampoco sabemos cuán responsables somos de lo que pasa con el clima, y peor aún, cuánto podemos realmente incidir en “mejorarlo”. Ahora bien, independientemente de si los problemas climáticos son engendrados o no por nuestras acciones. Si es cierto que hemos destrozado y hecho colapsar una serie de dimensiones de la vida en el planeta con nuestro modo de habitarlo. De eso no tengo duda alguna y sí estoy absolutamente convencido de la necesidad de mejorar nuestros modos de convivencia en torno a la calidad humana, animal y ecosistémica. Puede que el calentamiento global no tenga nada que ver con nosotros, sin embargo no lo necesitamos, tenemos muchos otros problemas ligados al consumo y a la industria (al Capital, simplemente) que nos llevan a vivir contaminados, hacinados, amargados. Y eso si es un tema. Y es por esto que, me irrito no con Greta, sino con el uso que se hace de ella, y el efecto “chupete” (pacifier, calmante) que tiene en nosotros, creemos que eso es, lo miramos por la pantalla y nos quedamos en paz. A ver ¿Quién dejaría de viajar en avión? Se responde solo, cosa de ver la progresión del mercado de vuelos en el mundo en los últimos años, delirante. Los datos están ahí, investigue. Cualquier aplicación como flightstats puede mostrar los vuelos que surcan el cielo en un momento cualquiera... impactante. Y esto sigue creciendo. Los aeropuertos del mundo, ya gigantes, colapsando... nuestro aeropuerto local solamente, aumentó de tamaño unas 5 veces en esta última remodelación, fastuosa, enorme... ese dinero es inversión, por entes que buscan utilidades... los vuelos y los aeropuertos son un negocio enorme y creciente, mientras celebramos a la niña que no va al colegio para luchar. La industria automotriz, el aumento en la producción y venta mundial de vehículos es impresionante. El desarrollo permanente e incesante de nuevas autopistas que van cubriendo de asfalto del planeta ¿se piensa terminar? no, no se piensa, se hace sin medida. Los autos eléctricos... otro truco de la industria, existen desde los años 70, salen ahora al ruedo por asuntos varios, mas ligados al marketing y comercio que a cualquier otra preocupación. Liberan en cierta medida al petróleo pero traen asociados una enormidad de otros problemas para el ecosistema. Aquí no hay Greta que valga ¿sueltas tu Uber? Y así, se podrían dar ejemplos infinitos de las industrias que mantienen al sistema humano en un deterioro sistemático de la calidad de vida mientras se sostiene la ilusión de lo contrario. Vivimos en una ficción mediática hipnótica, que explota la capacidad humana para la disociación más extrema. Recuerdo un grupo de colegas en un congreso profesional en Rio de Janeiro, íbamos a una cena caminando, había que pasar por sobre los cuerpos de niños de unos 10 a 12 años que dormían tirados en las veredas de la ciudad, lo hacíamos como quien cuida de no pisar mierda de perro mientras se comentaba la alegría brasilera y etc... (Rio mismo es una favela de dimensiones inconcebibles, con un cascarón de clase alta que nos venden como si eso fuera...) Nuestro modo de vivir, lo que sustentamos con nuestras acciones diarias, nos está llevando a un mundo bien retratado en el cine futurista, Blade Runner, 1984, Brazil, etc... Pero, nos fascinamos con el global warming de Greta, mientras eso ocurre ¿alguien ha reparado en los edificios que se multiplican en el centro de nuestra ciudad, con departamentos de hasta 17 metros cuadrados, decenas de pisos... es sabido que en muchos de ellos para tomar el ascensor por las mañanas o las tardes puedes tener que esperar 40 minutos o más... Hay muchas dimensiones donde esta locura se repite. El problema del agua, está archi sabido que la industria minera y la producción agrícola desatada se llevan el agua... y todavía hay quienes piensan que el problema es su higiene diaria, y cuentan los minutitos de su ducha, entre angustiados y orgullosos... mientras el capitalismo desatado hace que tu esfuerzo sea un gesto de niño, de embrión. El Capitalismo no tiene medida. Mientras no lleguemos como humanos a ser comunidades a escala posible (más bien pequeñas) en red con otras similares, regulando desde los intereses comunes las posibilidades de desarrollo... estamos fritos. El fenómeno Greta no es muy distinto al fenómeno Obama, el fenómeno Bachellet. Minorías, niños, negros, mujer... el abuso marketero del ícono de los oprimidos, para seguir anestesiando pueblos dormidos y sustentando un sistema que no queremos mirar. Mientras monarquías europeas y grandes intereses económicos celebran y descargan en Greta sus responsabilidades, la elevan y ponen nuestra atención en ella... ¿tienes registro de cuántos activistas radicales por la tierra han muerto en extrañas condiciones recientemente? .... La Greta mediática utilizada, no la niña apasionada y jugada... la manipulación va encubriendo ... 25 comentarios 25 comentarios Andrea Coddou Méndez Chapeau! Lúcido, lúcido 1 · Responder · 1 años Escribe un comentario…

Zombie Apocalipsis

Leo que algunos países no sólo reducen jornadas laborales sino que además se preocupan de una "mesada de bienestar mínimo" para sus ciudadanos en situación de cesantía o pobreza. El pensamiento materialista sigue confundiéndonos. Podemos tener breves jornadas laborales y mucho tiempo libre, y todas nuestras necesidades materiales cubiertas. Sin embargo, si no tenemos un lugar en el mundo en el que podamos hacer algo con y por los otros que son nuestra comunidad humana, si lo que hacemos no viene de un sentido personal de ser creativo y útil en el mundo, si no nos sentimos contribuyendo a la creación de un mundo bello y ético, el sinsentido y el vacío se apoderan de nosotros y los innumerables caminos de conducta evitativa y adictiva seguirán siendo el resultado. La pobreza no es sólo material. El mundo actual es pobrísimo, incluso en países muy ricos. Llevo tiempo pensando que la reproducción sin freno, el aumento de población infinito, mientras no nos preocupamos de un mundo posible para cada uno que llega, es parte del gran desastre. Población hormiga, cada mañana hacinado en el metro, sueldo mínimo, trabajar comer drogarse dormir... pobres y también ricos... mano de obra barata y sus explotadores... entes.

Parejas en encuentro...

La base para trabajo de pareja. Es lo necesario alcanzar para considerar posible el encuentro terapéutico en pareja. Antes, estamos en negociaciones y entrevistas a los fines de ver si podemos llegar a éste punto de quiebre. Vamos al encuentro en el ánimo de asumir nuestras *propias y personales* cegueras y aportes a la obstaculización. Si el modo de participar es ir a denunciar cuánto más perturbado está el otro, buscando que el otro se lleve la responsabilidad de lo que ocurre, en lugar de asumir lo propio e interesarse por ello, estamos en la dirección opuesta. Si no creemos que la problemática es coconstruida más que causada por el otro, estamos en posición de víctima, no hay camino aún. Para este tipo de trabajo es esencial poder dudar de las propias percepciones y convicciones, abriendo espacio para las del otro, en equilibrio. A veces las parejas llegan ya en este punto, a veces casi casi, a veces muy lejos. La aventura de los caminos posibles. Para mí como terapeuta es un bello trabajo, de gran aprendizaje e involucramiento, y sin duda alguna esencial en mi formación ha sido el doloroso aprendizaje desde mis cegueras y torpezas. Es reparador poder acompañar a otros a superar y conducirse donde uno alguna ves no pudo. Hay algunas variaciones donde el encuentro siendo posible por lo planteado antes, no es posible por la decisión de uno de los dos o ambos. Siendo consciente del desafío, bien legitimo es elegir los desafíos que queremos tomar en la vida y los que no. Podemos tener clarísimo que la problemática es coconstruida, entender nuestro aporte al problema, y sin embargo no sentirnos capaces de asumir el trabajo. No se si esté demás decirlo, aquí el amor en todas sus versiones y profundidades, comenzando con el amor propio, es fundamento. 0 comentarios Escribe un comentario…

El Narcisismo de los Otros...

Hay un abuso y mal uso de los conceptos del espectro narcisista, al servicio de la victimización. Que es una posición muy limitante que muchas personas toman después de haber pasado por relaciones abusivas o violentas. La violencia en una relación que se desarrolla en el tiempo (cuando no es un asalto de un desconocido) es una formación relacional. Si uno de los dos, permaneciendo allí, toma una posición fija de víctima, el narcisismo (y el diagnóstico ampliamente) y los conceptos relacionados vienen a consolidar la situación. Una víctima siempre está paralizada, siempre esperando y dependiendo de lo que el culpable haga o no. El drama y la victimización son una cultura, una forma de vida inocente paralizada. El problema no es el narcisismo del otro (las víctimas a menudo son muy narcisistas también), el problema es lo que eliges para tu vida. En las relaciones, si somos víctimas, somos víctimas de nosotros mismos. Valentina Martínez Molina Realmente es muy complejo Matias, si bien hay una danza, no son lugares equivalentes, el poder de definir la relación es dicimil. Cada uno es responsable de su forma de participar, pero esa reflexión es después que puedas estar a salvo. Complejo y doloroso. Matías Fernández Valentina Martínez Molina muy de acuerdo, sé que es complejísimo y por ello un tema muy evitado en lo público por gente bien experta. Sé lo que provoca mover el tema. Sin embargo, no por complejo o delicado, lo vamos a dejar oscuro. Me gusta lo que dices, lo que planteo no excluye tu aporte. Me enfoqué en el excesivo foco puesto en el otro como perpetrador que se ve con frecuencia. Situar el problema en el narcisismo perverso del otro, es la mejor forma de repetir la historia. De dejar toda la responsabilidad en el otro y quedar objetalizado. La toma de la responsabilidad propia, desde un lugar sin riesgos, Totalmente de acuerdo, y una práctica fundamental.