Hablemos de Hibernación... (Omnipotencia de las Ideas)

El martes recién pasado recibí alarmados llamados y mensajes de diversas personas en un lapso de pocas horas. Daban por hecho que se decretaría una cuarentena total, sin ningún tipo de salidas, que se dio en llamar “Hibernación”... Había angustia y desesperación... luego me enteré que fue un fenómeno en las redes y que circuló rápidamente llegando a autoridades que tuvieron que salir a desmentir. Fui a ver la propuesta y los proponentes... un centro de estudios con harta cara de aspiración política, mucha buena voluntad, harto colegio privadísimo y universidades del área más trendy europea y norteamericana. Revisé columnas, un pensamiento ordenado, informado, pulido... claramente entrenamiento en escribir papers y analizar datos.. Ahí mismito veo el problema, me quedo con la sensación de que pecan de un particular ombliguismo, de las evidentes condiciones de vida de los integrantes del centro de estudios, cómodamente analizando datos, generando gráficos en la amplia comodidad y lujo del abc1... todo es posible. Es como jugar Metrópoli... casitas en un tablero... Para la enorme mayoría de los chilenos todo esto no es un juego de análisis de hermosos gráficos en el macbook, tibiecito y con un buen café en la mano... es la lucha del día a día por llegar a fin de mes sin congelarse ni privarse de lo más básico. El estudio / propuesta de Hibernación está hecho en base a proyecciones matemáticas muy inteligentes. La realidad es otra historia. “Dormir la ciudad”... casi la mitad de los hogares del país no cuentan ni con internet ni con los recursos para pagar compras a domicilio (no he dejado de preguntarme quienes son los dueños de cornershop.. de pasada)... A estas alturas de restricción, aún con el aumento de controles y sanciones, la gente sale pues una enormidad de personas vive del trabajo diario, se las arreglan como pueden. Hay desesperación. La ceguera a la realidad de la base poblacional del país viene afectando a las clases dirigentes y educadas desde hace mucho tiempo. Los modelos matemáticos son entretenidos, fascinantes. Como los mapas. La confusión de mapa y territorio viene teniendo un resultado feroz sobre los ciudadanos. Sistema educacional público diseñado por quienes jamás llevarían a sus hijos a tales establecmientos. Sistema de Salud Pública que no es ni de cerca visitado en el lugar de sus pseudo beneficiarios. Un sistema de transporte desastroso que jamás vieron ni de cerca quienes lo ordenaron. Y así. Chile es como una hacienda, un fundo. Los dueños, los administradores y algunos colaboradores que caen en gracia a ese nivel, y el peonaje, que se arregla como puede. Administradores y dueños se sienten muy gallardos con lo que consideran su trabajo, olvidando que quienes ponen a diario la mano de obra para la ejecución no son ellos y son igualmente necesarios. La mentalidad colaborativa que nos hace falta, nace en la consciencia de la interconección que tenemos entre todos. Casualmente conocí a un Danés en un avión, había estado un par de meses en Chile instalando una planta industrial. Se iba alegre de volver a su país y algo espantado del nuestro. Simple, para él, que en su país es parte de un sistema en que los trabajadores comparten la propiedad de la empresa, un trabajador merece todo el respeto del mundo y jamás se le da una orden, u opinión que no haya pedido. Cada uno conoce su trabajo y cómo obtener ayuda cuando la necesita. Pero lo que más lo espantó venía de la diferencia planteada, en su realidad laboral la diferencia de sueldos entre el que más gana y el que menos era 1 a 3. Estos grupitos de intelectuales y políticos finamente formados en las capas más altas de nuestra sociedad y purificados en centros del norte del mundo, parecieran tener una relación distante y muy ignorante con la vida popular, me pregunto que habrá pasado por esa experiencia de pastoral estudiantil en que les tocó vivir una semana en una población y quedaron expertos... La omnipotencia del pensamiento y las ideas sobrevaloradas, sostenidas en el privilegio social y laboral más absurdo y extremo... es algo tremendamente dañino y peligroso. Si la circulación del rumor de Hibernación del día martes no fue seria (cuesta creerlo) entonces fue una forma de un grupo de anónimos de comenzar a aparecer con obvias pretensiones políticas. Abusando de la mala memoria, el centro está compuesto por varias estrellitas estrelladas de pasados gobiernos, con buena labia y pluma fina. Pero los hechos están ahí. En un administrador político voy a confiar, el día en que se componga una propuesta de gobierno por gente que acepte vivir en vivienda social, llevar a sus hijos al colegio del barrio, aceptar sueldo mínimo, atenderse en sistema público de salud y viajar en transporte público. En dos años somos Dinamarca. La vergüenza y el abuso tiene límites. La becas las pagamos todos.